Una de las primeras decisiones a tomar será si lanzas tu propia idea de negocio con el mayor riesgo que pueda suponer, aunque también más beneficio, o entras con tu negocio de la mano de un franquiciador que te aporte su know how y experiencia. Alternativamente surge la opción de comprar un negocio en funcionamiento con una cartera de clientes consolidada.

Ir a Arriba